Lo mismo que hay un gran número de películas que nos lo hacen pasar mal a base de sustos, sangre, vísceras y demás recursos no estilísticos pero muy efectivos, existe un número indeterminado de películas que pretenden dejarnos muy intranquilos. Este tipo de películas tienen la habilidad de introducirse en nuestra mente generando sentimientos negativos o un mal sabor de boca en cuanto al final del argumento o respecto a algún personaje. En estas películas hay que entender que existe un mayor esfuerzo por crear ambientes negativos por lo que las tengo en un nivel más alto que las de terror.
Algunas de las que puse la semana pasada podrían entrar en esta categoría por su riqueza de estilos y también puede que alguna de las que hoy indico tenga su pequeño rincón del terror, pero las he elegido porque me causaron miedo psicológico. Seguid leyendo.
El Resplandor (The Shining, 1980):
Película de Stanley Kubrick basada en un libro de Stephen King. La verdad es que es una versión más del director que del escritor, y puede que éste último no la tenga entre sus favoritas, pero es innegable que estamos ante una gran obra del cine. El ambiente que llega a crear, gracias también a su banda sonora, es agobiante, intranquilizador, pesado.
Un escritor se ofrece para cuidar y mantener un hotel que durante el invierno queda aislado por la ventisca y la nieve, llevando a su familia con él. El Overlook es un gran hotel que ha conocido varias épocas, como los locos veinte, y por él han pasado multitud de personas...y varios hechos no tan conocidos fuera de ciertos círculos. El aislamiento produce un extraño efecto en el escritor, y comienza a cambiar.
Si no la habéis visto, me gustaría dar mi opinión sobre un tema controvertido que afecta directamente a la impresión que podéis llevaros al verla: el doblaje. Se ha escrito mucho sobre el doblaje en español de la película, que si las voces no eran profesionales, que se cargan la película, etc. Sólo tenéis que saber una cosa: las voces en español de Jack Nicholson y Shelley Duvall son IDÉNTICAS a las originales y personalmente escogidas por Kubrick. Más aún, la voz más criticada es la de Verónica Forqué, que dobla a Shelley Duvall, y es la voz de una mujer débil y confiada que se ve envuelta en una situación muy distinta a su vida normal. Yo la entiendo así y me asusta más.
Por otro lado, las interpretaciones son brutales, empezando por Jack Nicholson haciendo de escritor bloqueado y de perturbado extremo.
El Exorcista (The Exorcist, 1973):
Si hay una película que tarde o temprano terminas viendo es esta. Alguien te ha hablado de ella y si no la conoces es que no has visto cine. Obviando el hecho de los minutos típicos que todo el mundo recuerda, la película tiene unas escenas que quitan la respiración. No sigo más que esto: la cara blanca.
Por supuesto que la banda sonora hace de las suyas, proponiendo una calma que está a punto de acabar.
Aunque la película trata claramente el tema del exorcismo, para mi la verdadera historia de terror es la del joven sacerdote cuya fé se ha debilitado recientemente tras perder a un ser querido. Esa es la parte de la película que recuerdo con más fuerza, sobre todo por la cara blanca.
Al final de la escalera (The Changeling, 1980):
Creo que la recuerdo de haberla visto tantas veces incluso con una edad no apta para ver esta película, pero qué le vamos a hacer, yo estaba sólo y la película estaba ahí.
Sin duda ninguna es la que más me gusta de estas tres y la que más me ha llegado a asustar. Su banda sonora es primordial para crear desasosiego y su protagonista, un genial George C. Scott aporta esa tristeza necesaria para terminar de ponernos en situación.
Un compositor pierde a su familia en un desgraciado accidente y al mudarse a una casa antigua nota algo extraño. Se suceden ruidos, presencias. Y al final de la escalera que da al último piso hay algo que conecta directamente con la historia de quien vivió a principios del siglo XX en aquella casa.
A modo de nota informativa, la sesión que vemos en la película Los Otros, de Alejandro Amenábar, está claramente inspirada en la que podemos disfrutar (¿disfrutar?) en esta película.
Tiene momentos muy tensos, con acercamientos a primer plano en los cuales comprendemos qué se nos quiere contar, y una opresión en el corazón igual que la del protagonista. Os digo también que yo habría huido despavorido de aquella casa en vez de hacer lo que el protagonista. Pelos de punta. Por cierto, aunque el trailer no está en español, la película entera está colgada en castellano en Youtube, dividida en 10 partes.
Claro que hay muchas mas, estas sólo son un ejemplo de las películas que me han causado este efecto. Espero que las disfrutéis.
Foto:
1 comentario:
Que miedito...
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