Descubrir 1.0: Tecnología

Hace algunos años, con cierta versión de Windows apareció una aplicación llamada Media Center, y permitía centralizar servicios multimedia como vídeo, música, radio, DVD o TDT mediante el PC. Una buena idea sin duda conectar el PC al televisor para acceder a los contenidos mediante un mando a distancia. Evidentemente la época no era la más propicia, pero eso lo sabemos ahora. En el mercado existían literalmente montones de marcas que ofrecían reproductores con capacidad para leer varios formatos de vídeo, entradas USB, para tarjetas de memoria, etc., pero ninguno satisfacía todas las necesidades características que se pueden considerar usuales dentro de este relativamente joven mundillo de los Media Center.

Problemas con el sistema operativo, ruido continuo de la fuente de alimentación, o la casi obligación de dedicar ese ordenador sólo a esa tarea para evitar errores originados por otras funcionalidades del ordenador, tales como juegos, navegación, etc. La implementación de este tipo de ordenador en nuestros salones ha ido en aumento y los ha venido transformando hasta un punto en que tenemos varias soluciones, unas expresamente dedicadas a la función de Media Center, y otras adaptaciones ingeniosas de

aparatos inicialmente pensados para otros fines. Por supuesto el precio ha ido en consonancia con esta transformación, teniendo en cuenta que muchos de los Media Center actuales no son exactamente ordenadores, sino reproductores de alta gama con una buena dosis de personalización y escalabilidad. Esto es posible a la implementación de microprocesadores similares o iguales que los que montan los ordenadores actuales, tarjetas gráficas más o menos comerciales capaces de reproducir alta definición y tarjetas de sonido con especificación de DTS para arriba. Se ha incluido la salida HDMI como un estándar y el mando a distancia para controlar las funciones del aparato.

Pero además, ahora contamos con internet de banda ancha en muchos hogares, conexiones capaces de hacer streaming de alta definición con poco o ningún problema. Esto supone un gran avance para los Media Center, ya que pueden incluir la posibilidad de suscribirnos a futuros servicios de streaming como NetFlix (cuando llegue a España, claro) y tener en el mando a distancia la llave para ver casi cualquier película en segundos. Más adelante haré mención a otros servicios de índole más económica, pero también menos fiables.

Otra opción si no la trae nuestro televisor, es que incluya sintonizador de TDT, de manera que podamos grabar de la programación.

VIDEO

El streaming de vídeo, también hay que decirlo, no es nuevo. Hace años que Microsoft ofrece películas a través de su consola Xbox 360, incluso en alta definición a 1080p. También Sony a través de su PS3. iTunes hace relativamente poco que alquila sus películas en España. Ahora los fabricantes de televisores se han puesto las pilar y nos ofrecen muchos más servicios en sus aparatos, tales como instalación de aplicaciones, acceso a redes sociales, reproducción de vídeo desde medios externos, cliente DLNA, etc. Con lo que la competición está servida. Ahora bien, si queremos instalar un Media Center, ¿qué requisitos debo considerar? Primero, evidentemente, si le vamos a sacar partido. El caso de muchas personas es ver toda esa cantidad de películas compradas en DVD y no por ello quieren tener varios reproductores en el salón. El caso de todavía más gente es el más obvio: se han descargado infinidad de películas y series y quieren poder centralizarlas y poder verlas en su TV de 40 pulgadas y con su sistema de altavoces. Y cuando sea posible, además en HD.

Tenemos, pues, este último caso como el más usual y además el que lógicamente requiere de disco duro y capacidad de reproducción amplia en cuanto a formatos y conexiones. Aunque muchos televisores cuentan con reescalado de la imagen, los vídeos de resolución estándar no se ven tan bien en una pantalla más allá de las 26 pulgadas, razón por la que desearemos que el contenido que obtengamos esté en alta definición, mínimo 720p (realmente es la mejor resolución a la que podemos visionar de momento los contenidos. El 1080p está sobrevalorado e infrautilizado, excepto por dos películas, Avatar y un 60% de El Caballero Oscuro, además de ciertos documentales como Tierra, filmado en IMAX). La resolución de 720p se ve realmente bien en pantallas de 47 pulgadas, así que en 40 no me preocuparía. De todos modos, allá cada cual. Otro motivo por el que utilizar esta resolución es el espacio disponible: una película de 2 horas en 1080p puede ocupar 8, 10, 15 o más gigabytes, si es ripeada. Si es directamente copiada de HD-DVD o Blu-Ray se dispara hacia los 40GB o más (y con los ripeos de hoy en día se va a ver igual XD). Los episodios de una hora en 720p como los de Game of Thrones se encuentran allá por los 2,7 GB (en inglés tienen sonido 5.1, por eso ocupan más que en español a 720p).

Conexión de vídeo. Aquí me pierdo un poco, no porque no sepa qué conexión prefiero, sino porque electrónicamente no conozco a fondo ninguna. Sé que quiero que se vea bien y punto. Existen varias opciones:

-High Definition Multimedia Interface, o HDMI. Esta conexión tiene la gran ventaja de ser un estándar hoy en día. Su versión anda por la 1.4 y ya tiene posibilidad de transmitir datos paralelamente a nuestro contenido audiovisual. Tiene como principal característica la transmisión de audio y vídeo a través de un sólo cable. Hasta 1600p, posibilidad de vídeo en 3D y audio multicanal de alta definición en los formatos estándares de HD (versión 1.4).

-Digital Visual Interface, o DVI. Conexión digital (y analógica según variante) cuya utilidad se ve justificada en obtener mejor calidad en pantallas planas. Sólo transmite vídeo hasta 1920 x 1200 @ 60Hz.

Parece evidente la elección, ¿no? Quizá sí, pero tengamos en cuenta que si queremos reproducir el audio en un sistema de altavoces el HDMI se conecta al televisor, y no todos los modelos de televisor tienen a su vez una salida de audio multicanal. Por ejemplo, mi TV es una Samsung LCD C650, y su salida de audio es estéreo digital en 2.0. De este modo estaríamos perdiendo los 5.1, por tanto yo tengo un cable DVI para el vídeo y otro óptico para el audio directo al sistema de audio. Importante pues elegir bien la conexión en función del televisor, o mejor aún, que tenga varias para elegir.

Una vez solucionado el tema del vídeo, hay una variante, los subtítulos. Deberemos elegir un Media Center con un software capaz de leer las pistas de subtítulos integradas en el contenedor de vídeo (AVI, MKV, OGM, etc.), o bien que pueda representar los subtítulos leyéndolos desde un archivo (SRT, SUB, SSA, etc.)

AUDIO

El audio es un asunto delicado, he podido comprobar que un Media Center de buena calidad se ha retrasado un poco a la hora de reproducir DTS o Dolby Digital (en realidad, aunque se llaman diferente y pertenecen a distintas empresas, son formatos muy parecidos). Esto me lleva a suponer que necesitamos un buen procesador de audio, un microprocesador potente (de Core2Duo 1.x para arriba) y una salida óptica. Aquí se podría dividir la elección: están los que tienen un sistema de altavoces con su propio procesador y preferirán la salida óptica; y están los que prefieren que el Media Center lo haga todo y ofrecer los canales ya separados y decodificados a los altavoces. Yo me decanto por la salida óptica y unos altavoces Logitech Z-5500 (que algún día renovaré, pero que me siguen pareciendo espléndidos).

RED E INTERNET

No podemos obviar que actualmente muchos hogares disponen de más de un ordenador, y en cada uno de ellos puede alojarse música, series, películas, fotos, etc. Un buen Media Center debería poder aprovechar la conexión de red de tu casa para, haciendo uso del streaming, mostrar todos estos contenidos previa configuración y permiso. Por supuesto que si no tenemos red física de cable con conectores RJ-45, elegiremos aquel Media Center con conexión inalámbrica mediante Wi-Fi, pero a ser posible de alta velocidad. Nada puede ser más frustrante que comprobar que tus contenidos de alta definición alojados en otros ordenadores se ven a tirones porque tu red o tu Media Center tienen la especificación a, b ó g. Preferiremos n o superior en este caso.

La conexión a Internet parecería que no es muy importante para la función de Media Center. Veréis, soy de la opinión de que un ordenador sirviendo como Media Center no debe ser usado para nada más, por tanto parecería que el que tengo es uno dedicado, pero no es así. Simplemente no lo uso para navegar, jugar, recibir correo, etc. No lo uso como ordenador, pero si quiero ciertas características de un ordenador en mi Media Center. Más abajo explicaré la razón. Como decía, Internet puede jugar un papel muy importante en los Media Center si tenemos en cuenta los servicios de alquiler de películas y series en streaming, que en España están empezando a despegar. Pero si no queréis esperar a que despeguen, una alternativa gratuita y por tanto no demasiado fiable de momento son Pelisalacarta y Tvalacarta. Son plugins para Media Center y ofrecen gran cantidad de contenidos para ver online, aunque como ya he indicado, no esperéis demasiado en cuanto a calidad ni fiablidad de funcionamiento. De momento.

En los últimos tiempos se ha liberado de maneras que no voy a describir el sistema Airplay de Apple, por tanto habrá programas y servidores que podremos instalar en nuestro Media Center para en un momento dado hacer uso de ellos. ¿Que qué es Airplay? Un servicio a través del cual podemos lanzar contenidos como música, fotos y vídeo desde un dispositivo iOS hacia un AppleTV, a saber: iPhone, iPod Touch y iPad, a partir de la versión 4.x (donde X es “no tengo tiempo de buscarlo ahora XD”). No sé si en el futuro otros teléfonos / dispositivos implementarán algo parecido, pero de momento puedes ver en tu media center vídeos de Youtube, vídeos de tu teléfono, música y fotos alojadas en el mismo. Algunos juegos y aplicaciones en el futuro también aprovecharán esta función a partir de la siguiente versión de iOS (iOS5). Si la liberación de ese código ha servido para algo, a lo mejor podremos tener estas capacidades en nuestros Media Center.

DISCO DURO

Si algo ha cambiado enormemente a lo largo de los años en la informática ha sido la capacidad de los discos duros. Para un Media Center cada uno debería poder decidir lo que quiere. En un primer momento a lo mejor quieres tener el máximo posible para almacenar todo lo que puedas, pero con el tiempo uno se hace selectivo y práctico. Yo prefiero tener un tamaño más ajustado que permita al sistema arrancar rápido y moverte rápido por los contenidos, sin despreciar un buen tamaño. Creo que un TeraByte va bastante sobrado. Además piensa si quieres conservar los contenidos una vez los has reproducido. Yo suelo borrarlos una vez vistos y a otra cosa. Mi Media Center venía con un disco duro cortito, de 120GB y contando que ahí se incluye el sistema operativo y el software de Media Center. Es importante no llenar demasiado el disco duro por aquello de mantener ágil el sistema, es decir, si te quedas con 2 GB libres, es posible que el vídeo se reproduzca con saltos o el audio se desincronice.

CONECTIVIDAD

Si además de almacenar los contenidos en un disco duro, obtenerlos por streaming por Internet o en red desde otros ordenadores queremos conectarle un pendrive USB o cualquier otro medio necesitaremos conectores. El USB 2.0 es una buena opción para pendrives y discos duros, pero la velocidad de transmisión se queda un poco corta para reproducir contenido en alta definición, razón por la cual nuestro sistema de entretenimiento tirará de buffer o dispondrá de un curioso cuello de botella, que se traduce de nuevo en tirones y saltos. Actualmente se dispone de USB 3.0, con mayor ancho de banda. Y otra conexión a tener en cuenta es Thunderbolt (originalmente Light Peak), desarrollada por Intel y Apple, cuyo ancho de banda es mucho mayor que los anteriores al tratarse de transmisión de datos mediante luz como en la fibra óptica, pero adaptada a los conductores de cobre. También de momento.

Como ya he comentado antes, en dicha conectividad cuento también un puerto RJ-45, Wi-Fi, conector óptico de audio, DVI y HDMI. Como curiosidad, el Bluetooth lo utilizan algunos teléfonos para emitir contenidos, que en teoría se podrían canalizar hacia el Media Center.

Es posible que también queramos que pueda grabar la programación, para ello existen varias opciones comerciales de sintonizadores TDT HD en USB, como Avermedia o ElGato.

DISCOS ÓPTICOS

Si es posible, que pueda reproducir todos los formatos disponibles hoy día, como el DVD y Blu-Ray, además de CD. Mientras menos aparatos tengamos, menos conexiones, menos cables y menos mandos a distancia. También es verdad que si se estropea nuestro Media Center con todas sus funciones nos quedamos con el televisor pelado y al ordenador otra vez a ver las pelis XD.

SOFTWARE

Dependiendo de si el Media Center que elegimos es dedicado o un ordenador en toda regla, utilizaremos un software único o bien podremos instalar el que consideremos más adecuado. En el caso de ser único, tendremos menos opciones de elegir nuestro Media Center, pues habrá que escoger entre ciertas marcas como Dell, Boxee u otras. Si es el caso contrario, podremos optar por instalar XBMC (XBOX Media Center), PLEX, Boxee, etc. Estos son configurables en gran medida por el usuario, llegando incluso a personalizar cada página de contenido y descargar música e imágenes pertenecientes a la serie o película en cuestión. Existen además gestores de skins para algunos de ellos, de manera que si nos cansamos de ver siempre el mismo menú podamos elegir varias apariencias más. También pueden contar con servicio de descarga de carátulas en el caso de la música. Los hay con opciones de servidor, de manera que si tenemos varios ordenadores, pueden buscarse y hacer streaming entre ellos. Estos programas Media Center tienen incluso la flexibilidad para adaptarse al equipo que hayamos elegido desactivando funciones avanzadas o que requieren muchos recursos.

MANDO

Siguiendo en mi línea, soy de los que opinan que mientras menos cacharros, mejor. De manera que si con un solo aparato tenemos todas las funciones multimedia que queremos, contaremos con 2 ó 3 mandos a distancia: Media Center, TV y/o sistema de altavoces, en caso de que sea independiente. Y mejor mientras más sencillo, siempre que no vaya en detrimento de funcionalidades. Algunas de las alternativas de software Media Center cuenta con aplicaciones de mando a distancia avanzadas para smartphones como el iPhone, es el caso de XMBC y PLEX. Además, en el caso de la aplicación para PLEX, ésta posibilita la reproducción de medios desde el Media Center al smartphone.

POTENCIA / RUIDO

Muy importante. La máquina que pondremos en nuestra sala de estar para poder ver contenidos debe ser suficientemente potente para reproducir sin problemas, pero también hay que considerar que a más potencia, más calor y más necesidad de refrigeración. Si alguna vez habéis usado una XBOX 360 de las primeras sabéis a lo que me refiero. Tiene potencia para reproducir vídeo en FULLHD a 1080p y audio multicanal en alta definición, no pega ni un salto, tiene mando a distancia, puedes alucinar con sus juegos y posibilidades multimedia, pero su sistema de disipación de calor -a todas luces necesario e insuficiente, visto lo visto- suena como una hormigonera. El equilibrio siempre ha sido importante en los sistemas informáticos, aquí no lo iba a ser menos. Necesitamos potencia, pero que se pueda controlar con disipadores pasivos o bien con ventiladores que apenas den prueba de su existencia. No es plan de estar viendo un episodio de The Walking Dead en pleno clímax silencioso antes de un ataque y con el ruido de fondo de un ventilador desesperante.

ESPACIO / APARIENCIA

¿Cómo es nuestra sala de estar, nuestros muebles, nuestro estilo? ¿Se adapta el Media Center que queremos a nuestro hogar, o es una caja cuadrada con poco interés por la estética?

Antes no era así, pero ahora contamos con alternativas a los antiguos Media Center en formas diversas y varias de ellas ciertamente cuidadas. Elegid el que más os guste o se adapte a lo que queréis.

MARCAS

Aquí viene el verdadero quid de la cuestión: ¿cuál comprar una vez definidas las capacidades?

Me decantaría por un disco duro multimedia de altas prestaciones. Esto es, caro y sin posibilidad de ampliación salvo la capacidad del disco duro.
Un Media Center dedicado con buenas características y ampliable en cierto modo, que se pueda personalizar en cuanto a funciones y características de rendimiento.
Un ordenador construido por mí en una caja pequeña -léase, un HTPC- con las opciones que hemos descrito antes como más importantes y que sea silencioso. También caro, pero muy personalizable, incluso en el software Media Center, el cual podría ser elegido de entre varias alternativas o tener varios instalados.
Un ordenador no construido inicialmente para este fin, pero que encaje con todo, o casi todo. El mío.

Opciones hay muchas, desde el Inspiron Zino HD de Dell, que no es un Media Center pero tiene todas las papeletas; hasta el Acer Aspire REVO en todas sus versiones, pasando por la Boxee Box, la XBOX 360, la PS3, el Mac Mini de Apple, o los famosos Discos duros multimedia Western Digital.

Sin más, os dejo con los enlaces más importantes en mi opinión, espero haber abierto la suficiente cantidad de puertas como para que no compréis o fabriquéis lo primero que se os ocurra, sino lo que mejor se adapte a vuestro requerimiento, tanto en calidad y rendimiento como en apariencia y comodidad.

ENLACES

En cuanto a conexiones: